En los campos de exterminio nazi se marcaba a los prisioneros de la izquierda comunista y socialista con un triángulo rojo de tela.
Chapa de 25 mm de diametro.
Este último símbolo tiene una larga historia detrás. Se comenzó a popularizar tras la Guerra de los Seis Días de 1967 cuando Israel fijó como delito la exhibición pública de la bandera palestina en Gaza y Cisjordania, territorios que ocupó en aquel momento. La imagen de esta fruta usó como forma de rebelarse ante esta prohibición y en las protestas se portaban sandías, ya que coincide con los colores de la enseña, verde, rojo, negro y blanco.
Chapa redonda de 32 mm.
Lote de 5 tazas de Gata Cattana, Marcelino Camacho, Josefina Samper, Rosa Luxemburgo y Ernesto Che Guevara. Asas e interior de la taza en color rojo o morado.
Tras la Batalla de Pozoblanco, las comarcas de Los Pedroches y el Valle del Guadiato, fueron el escenario donde quedaron establecidas las líneas de frente. Las fuerzas contendientes llevaron a cabo una intensa fortificaron con trincheras, refugios, nidos de ametralladora, observatorios… Lugares como el Puerto Calatraveño, la Chimorra, Sierra Noria o los alrededores de Peñarroya y Fuente Obejuna fueron testigos de combates crueles y despiadados.
En este libro, partiendo de las principales operaciones militares, se hace un detallado estudio de cómo se organizaba el frente así como de su arquitectura bélica, sin olvidar los aspectos sociales o humanos de los combatientes o episodios menos conocidos como el paso por la zona de la XIII Brigada Internacional.
Autor: Manuel Vacas Dueñas.
Prólogo: Antonio Barragán Moriana
Edita: 17pueblos.es
Páginas: 256
Taza Julio Anguita, con asas e interior de la taza en color rojo o morado a elegir y con inscripción de una de sus frases más conocidas, "Malditas sean las guerras y los canallas que las hacen".